¿Cómo superar el miedo a grabarte? Ese miedo que te paraliza y que cuando quieres comenzar en Youtube u otra red de vídeo, hace que te quedes congelado.
Cuando ves vídeos de Youtube con frecuencia, tarde o temprano, llega ese momento en el que nos planteamos la idea de abrir nuestro propio canal, basándonos en la idea de que esto será beneficioso para nuestro negocio.
El problema es que cuando nos animamos a grabar, nos invaden los miedos: miedo a la cámara, miedo a no saber qué decir, miedo a cómo editar,…. Todo se vuelve una maraña de preguntas que no sabemos ni por donde empezar.
La solución es fácil:
¡empieza!
Es tan simple como comenzar a grabar y editar. Esto hará que con el tiempo vayamos cogiendo soltura y cada vez lo hagamos mejor.
Y para acelerar ese proceso hoy te propongo:
5 TRUCOS SOBRE CÓMO SUPERAR EL MIEDO A GRABARTE:
¿Qué encontrarás en este post?
Nunca me cansare de recomendar que lo principal antes de grabar, es tener un guión. Es un elemento común que se utiliza tanto en televisión, en cine, radio, series… da igual el formato, TODOS tienen un guión para grabar.
Un guión ayuda a reducir costes, tiempo, esfuerzo y sobre todo mejorar el resultado.
En el caso del miedo escénico, el guión es lo que te ayudará a evitar que te quedes en blanco. Incluso puedes montarte tu propio teleprompter (muy pronto os contaré cómo). Este guión no tiene que ser escrito palabra por palabra con lo que vas a decir, sino un esquema o estructura, que diga los distintos puntos a tratar. Todo esto lo vemos en profundidad en el curso de guión o también puedes leer mis consejos para escribir un guión.
Puedes practicar tu guión varias veces frente a un espejo o ante la cámara sin grabarte. Así cuando llegue el momento de grabar, estarás más suelta y tranquila ya que tienes claro qué quieres decir y cómo.
Como te he dicho en el punto anterior, solo la practica hará al maestro. Lo ideal es practicar un par de veces antes de grabar y grabar varias tomas.
Pero tampoco te obsesiones y practiques un guión de un minuto durante horas. Solo conseguirás parecer un robot, perder tu motivación y alargarlo demasiado en el tiempo.
Practicar sí, pero con moderación. El objetivo es que logres interiorizar qué quieres contar y sea mucho más fácil cuando te grabes.
Esto es algo que yo intento aplicarme cada día, no pienses que el vídeo tiene tanta importancia.
Lo cierto es que estamos rodeados de sobreinformación y que en el caso de que logres atraer la atención de alguien, esa persona no te va a juzgar tanto como tu misma. Si no le gusta lo quitará y si le interesa se quedará. Así de simple.
Es cierto que en algún momento algún hater que te escribirá cosas negativas, pero ese grupo de duendecillos mal pagados y que parecen estar enfadados con el mundo, en realidad, lo único que hacen es escribir por aburrimiento y por su sensación de poder.
Y si todo esto no te convence, entonces piensa en lo que me digo a mi misma muchas veces: dentro de 100 años, cuando todos los que estamos preocupados por nuestros vídeos ya no estemos en este mundo, ¿tú crees que a alguien le va a importar lo que dijiste o si te veías más o menos ridícula?
Es más, si me apuras, aunque hicieses el vídeo más ridículo del mundo y fuese el más viral hasta el momento, no se hablará sobre ello más de un par de semanas.
Vivimos en una época en que las cosas cada vez van más rápido y solo interesa lo que pasa AHORA.
Luego:
– pros de grabarte: mejorar y hacer crecer tu negocio
– contras: hay una posibilidad entre un millón de que durante un par de semanas se hablase sobre ti y tus vídeos. Y aunque ese fuese el caso, realmente crees que eso va a perjudicar tu negocio? Salvo que te grabes matando gatitos, créeme que esos vídeos (a pesar de darte vergüenza) podrían aumentar tus ventas.
Conclusión:
Tanto en lo bueno como en lo malo, los vídeos aumentan las visitas
Puedes empezar creando un grupo con tu familia o amigos, en el que les cuentes tu día a día. Poco a poco te irás acostumbrando a verte, a escucharte y a sentirte más cómoda delante de la cámara.
Después puedes pasar a los stories de Instagram o a algún tipo de vídeo live. Y cuando te hayas familiarizado con el formato, podrás empezar a grabar tus propios vídeos.
Sentirse cómoda delante de la cámara es un proceso, y cuanto antes empieces mejor.
Si te da vergüenza grabar y que te vean, intenta no grabar con tu familia pululando por casa. Busca una hora y un lugar donde nadie te moleste, donde puedas hablar todo lo alto que quieras y donde no tengas miedo de nada, porque estas a solas.
Cuanto más tranquilo te parezca el lugar, más posibilidades de que te sientas cómodo y que en el vídeo se te vea relajado y natural.
¿Cómo haces tú para estar cómodo?
¿Me he olvidado de algo? Cuéntanos en los comentarios que haces tú para perder el miedo a la cámara.
© 2021 Hecho con ♥ y mucha ilusión · Melani Cazorla